"Hace mucho tiempo se nos prohibían montones de cosas. Había verbos peligrosos a los que no podíamos asomar la nariz. Ni los ojos. Tampoco la boca", dice ella. "Hace mucho tiempo nos obligaban a hacer montones de cosas. Había verbos que ejecutar con urgencia para mantenernos alejados de las peligrosas emociones", dice él. Un diálogo poético y reflexivo sobre lo que significa ser "hombre" y "mujer". Los textos breves, pero de gran profundidad, nos llevan a experimentar diferentes emociones y a cuestionarnos sobre los prejuicios que muchas veces reproducimos en nuestro trato con los otros.